Les confieso que preferí pasar casi todas las Fiestas Patrias ordenando la casa, pero profundamente, esas limpiezas que ni en los fines de semana te da para hacer. Hice una limpieza total, botando papeles que perdieron vigencia, ordenando los papeles que si me importan, saque bolsas de ropa para regalar con piezas que ya no me quedan o que luego de un par de años ya pierden el appeal, le regalé a mi mamá el vestido dos tallas más grande que luego de 1 año en la bolsa arriba del closet, entendí que simplemente no iba a llevar al sastre. Inclusive logré que mi esposo regalará la media docena de gorras que nuna usa y el jean con un hueco random que usó para ver los conciertos de Soda Stereo en su última gira, todo un cliché real pero así es señoritas.
Hay que sacar lo viejo, lo que no usamos, lo que ya no nos gusta, lo que no sirve y eso aplica para todo, no solamente la ropa o papeles. También aplica para "amistades", hábitos, costumbres, manías, relaciones, carreras y más.
Haz espacios para que mejores cosas entren a tu vida.